domingo, 11 de enero de 2009

Descontrol

Momento y lugar... no podrían ser mejores, pero con eso no alcanza. Yo podría ser mejor, pero no lo soy. Como decía ayer, somos lo que somos, con lo bueno y lo malo. Planes y más planes, en tal momento, en tal lugar. Y nunca salen, y los seguimos haciendo y a nadie le importa, o sí importa, o lo que sea. Le dan cierto ritmo a la vida, algunos le dan gusto dulce, otros son un trago amargo. Pero al menos están ahí cuando todo lo demás es insípido. Claro, siempre hay una excepción, no todo lo demás, otro trago amargo. Realmente no importa, mejor así supongo.

Otro fin de semana que se termina, otro día tachado en el calendario que no tengo. Otro día menos hacia ese momento, fuera de ese lugar, dentro de ese lugar. ¿Qué estoy haciendo? Eso es bastante simple, estoy tratando de controlar lo poco que está dentro de mi control para sentirme seguro, para fingir un rato más. Es todo una ilusión, está todo dicho en el aire, estoy hilando en el sentido correcto pero en la dirección equivocada. Y está bien, es lo que quiero, de eso no tengo dudas, es lo que quiero dentro de lo que puedo querer. Que fácil es meterte las cosas en la cabeza y que difícil es sacártelas. La parte buena es que tengo una mente serena y un corazón made in Antártida.

Algunos hablan del alma. Supongo que es algo que hace referencia a la esencia de una persona, a lo que la hace ser lo que es, quien es. Por otro lado también la usan para explicar lo que sienten, lo que desean... aunque eso tal vez sea también parte de lo que son. ¿Es como un monstruito que tenemos dentro? Nos hace hacer cosas, pensar cosas, ¿sentir cosas? Y nos atormentamos constantemente tratando de entenderla, tratando de interpretar lo que dice. Y a veces nos gana, nos domina, nos estrella contra una pared y se rompe. Con el mostruito lastimado nos sentimos perdidos, buscamos arreglarlo. Pero hay un solo médico que puede curarlo y se llama tiempo, y está muy ocupado, a veces no hay nada que pueda hacer para ayudarnos. Puta reflexión, ¿para qué necesitamos esa mierda?

Como en un cuento de hadas... para eso necesitamos esa mierda. Algo tan simple y cotidiano, una vez, en un momento específico, en un lugar específico, en una situación única, una oportunidad, puede ser enorme. Tenés razón, no soy yo quien tiene el control, pero tengo mérito por tratar de ocultarlo. Es gracioso. Sigan felices!

3 comentarios de mis fieles adeptos:

Edu dijo...

Honestamente, no entiendo un carajo la mitad de las cosas que puse. Suerte con eso!

Anónimo dijo...

me encanto el final...
te dije que solito con tu alma ibas a darme la razon

;)

Edu dijo...

Mejor no respondo por aca...